LA EVOLUCIÓN DEL DIBUJO EN LOS NIÑOS

Los pequeños comienzan a desarrollar la psicomotricidad fina desde pocos meses después de nacer. Al tratarse de un blog centrado en el dibujo hemos visto interesante tratar el tema sobre la evolución de este en los pequeños de la familia.

Comenzamos aclarando que ley próximo-distal es la responsable del control de la motricidad fina, la prensión o la habilidad para usar las manos. Por otro lado es interesante tener en cuenta que los logros psicomotores finos y gruesos no son independientes (sistema dinámico). La marcha bípeda permite liberar las manos. Esto da nuevas posibilidades de acción y de representación.

Respecto a la evolución del dibujo infantil podemos decir no existe un tiempo determinado exacto en los que los niños empiezan a dibujar, ya que ello depende de numerosos factores como la estimulación, el entorno (la familia, la guardería), o los materiales que puedan tener a mano, etc. Aunque podemos decir que existen principalmente 5 etapas claramente diferenciadas.

Las rayas, zig zags y círculos son los primeros elementos que el niño dibuja, es decir los primero garabatos que realizan. Conforme los niños van creciendo van apareciendo en ellos nuevas oportunidades de jugar, caminar, dibujar, etc. El dibujo en este momento se convierte por lo tanto en una fundamental forma de expresión para los niños. El dibujo por tanto refleja la interacción entre diversos factores como la psicomotricidad, la capacidad cognitiva, la afectividad y la propia experiencia.

Aunque no podamos saber cuándo empezarán a dibujar sus primeros trazos, sí podemos analizar las 5 primeras fases como hemos dicho anteriormente del dibujo de los niños.

-        A los 18 meses aparecen los primeros trazos: Esta fase es la que primera de todas. A esta edad, los niños no tienen un control fino sobre su actividad motriz, de ahí que esos dibujos sean producto de movimientos descontrolados de su mano. Es por lo tanto muy común que los trazos sean o muy fuertes o muy débiles. Los niños no muestran su voluntad de hacer un dibujo concreto, es decir se trata de dibujos que no tienen una intensión realista. Su significado se da a posteriori.

Inicialmente, son líneas rectas, más adelante se convierte en zigzag o barrido al partir del movimiento de la articulación del codo, y por último, a partir de los 2 años aparecen las formas circulares puesto que ya articula la muñeca.

-          Entre los 2 y medio y los 3, estos trazos evolucionan hacia garabatos: dibujos que son interpretativos a posteriori y cuya atribución de significado los niños van cambiando conforme se les pregunta por ello. A partir de los dos años, los niños ya tienen un mayor control sobre su actividad motriz. Los trazos que hacen con su mano son más precisos y empiezan a cobrar formas algo concretas. El niño comienza en este momento a comprender el significado de dibujar.

-          A los 3-4 años, dibujos propiamente dichos. El niño todavía no tiene el control motor suficiente, y su atención aun es discontinua y se centra en los aspectos de la realidad que más le llaman la atención. Esto hace que sus representaciones sean esquemáticas. A pesar de ello sus trazos han evolucionado notablemente y ya comienza a realizar de forma mas precisa los círculos, y rayas horizontales y verticales. El niño empieza a desarrollar su capacidad mano-ojo y a situar sus dibujos en un espacio.

-          Realismo intelectual (5-8 años), pintan imágenes según lo que saben de ellas y no según lo que ven, por lo tanto suelen mezclar perspectivas. En este momento en niño ya casi se encuentra en la cumbre de la evolución de su garabateo. Ahora los trazos tienen formas reconocibles y normalmente lo más dibujado serán figuras humanas. Además ahora es capaz de controlar sus movimientos y dibujar lo que pretende.

-          Realismo visual (a partir de los 8 años): los dibujos van incorporando más detalles y ganan en complejidad, añaden otros objetos o personas y detalles del contexto. Los dibujos infantiles pierden esa gracia que los caracteriza al intentar los niños reproducir la realidad tal cual la ven limitándose al modelo, y algunos niños incluso dejan de pintar al darse cuenta de que su capacidad técnica para reproducir es limitada. Los colores son la mayoría fieles a la realidad.