EL MUNDO TRAS LA VIÑETA

Capitán Trueno, Zipi y Zape, Mortadelo y Filemon, son nombres que todos conocemos, que forman parte de nuestra historia y de la infancia de miles de españoles. Ellos y otros muchos son los protagonistas de una historia fascinante llena de aventuras, emoción y sonrisas. Historias que han servido para entretener a generaciones enteras de niños y no tan niños.

Héroes y villanos, princesas enamoradas, detectives audaces, caballeros que viven al límite y personajes a los que la vida no les da ni un respiro. Todos ellos están representados en cómics o tebeos. Podemos definir como cómic a aquella historia explicada mediante viñetas que contienen ilustraciones con un texto breve, el tebeo por otro lado, es una publicación muy similar a la anterior pero sin embargo esta va destinada sobre todo al público infantil y tiene un carácter humorístico.

Los tebeos o cómics forman parte de la historia más reciente de España, ellos son un espejo maravilloso de la sociedad y durante décadas su función ha sido la de entretener, mediante aventuras en las que la diversión estaba asegurada.

Los tebeos de nuestro país han sido un medio importantísimo en la formación sentimental, humana y cultural de las personas, en otras palabras, nos han formado como personas.

La verdadera historia del tebeo comenzó con Dominguin, un semanario cómico lleno de historietas. Aunque la primera revista que lo cambiaría todo sería TBO, un semanario que además de historietas contenía decenas de pasatiempos. 

A continuación llegaron a los quioscos nuevas publicaciones como Pulgarcito, Virolet, Macaco o Bebe, el primer tebeo para niñas. Por entonces, Tebeo alcanza los 130.000 ejemplares por semana.

Se produce la primera llegada de revistas americanas, los cómics estadounidenses llegan a España y causan una revolución enorme ya que estos se caracterizaban por contener historietas muy coloristas.

Los cuadernos de aventuras florecen y son aptos para todos los públicos. Entre ellos nos podemos encontrar con Roberto Alcázar y Pedrín, un tebeo de aventuras de acción, el cual  alcanza los 1200 números. Las expresiones "chúpate esa" o "ostras pedrín" proceden de esas historias. Por otro lado nos encontramos con Guerrero del antifaz, el cual narraba las hazañas de un caballero, siendo durante 22 años todo un clásico.

Mas tarde la editorial bruguera lanza el capitán trueno, un gran cuaderno de aventuras y un gran fenómeno de ventas. Las aventuras transcurrían en todo el mundo y la puesta en escena era brillante. Del mismo autor se creo el Jabato.

Las niñas también tenían sus propios tebeos, se denominaban Mis chicas. A continuación se publico Florita, Sisi y Claro de luna. A partir de la apertura de España al turismo, apareció Lilian azafata del aire y Mary noticias, tebeos protagonizados por mujeres trabajadoras que con sus aventuras desafiaban al machismo ya que el objetivo principal era reformular el papel de la mujer en la sociedad española.

Vuelve a renacer TBO y aparece Jaimito, en los cuales el humor era el principal protagonista. Pulgarcito marcaría un antes y un después en la historia del tebeo español. Nacieron personajes como la malvada urraca, el loco carioco o las hermanas Gilda del increíble Vázquez.

Nacieron también Zipi y Zape, unos niños traviesos incorregibles, donde la historia que cuentan siempre tiene una misma estructura, los niños hacen travesuras y su padre les castiga.

Por último no nos podríamos olvidar de aquellas historietas de humor. Tiovivo y Can can protagonizaban el humor para el público adulto. Aunque,sería Pulgarcito quién vería nacer otra pareja inolvidable, Mortadelo y Filemón.